Oramos con las siete peticiones, que son siete pedidos del Espiritu Santo al Padre por medio de Jesucristo, en comunion con Jesus.
Las tres primeras peticiones se refieren a la contemplacion de Dios que desciende en Jesucristo donandonos la santidas, su Reino y su voluntad, pues Jesus es para el cristiano la Santidad, el Reino y la voluntad de Dios y vive para la santidad del Padre, y para regalarnos el Espiritu Santo que nos hace santos, nos hace vivir su Reino y cumplir su voluntad.
La peticion central es la plenitud entre la encarnacion del Hijo de Dios que nos hace hijos en Jesus y el descenso a nuestra realidad. En el Pan de vida, el Pan del cielo, la plenitud de Dios y el hombre, Jesus, el que se hizo pecado por nosotros y nos dio la santidad del Padre, por la que vivio y murio, y que esa manera de amar Dios la resucito y a nosotros juntamente con el. Es el misterio de la Eucaristia, que acontece cada vez que la comunidad celebra la muerte y resurreccion de Jesus.
Las tres peticiones finales son la accion sanadora, purificadora, ante nuestro pecado, tentacion y esclavitud al Maligno y sus ambitos, mundo y carne.
Las siete peticiones estan por eso pendientes de la comunion con Cristo, en la cuarta peticion, del Pan que es Cristo, en la oracion que Jesus mismo ora con nosotros. A la vez que en esa oracion el amor transfomante nos cristifica hasta poder ser hijos que dan gloria a su Padre en la union a Cristo, el Hijo de Dios.
martes, 24 de junio de 2008
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